El lugar de lo vivido

Novela
Malisia editorial
La Plata, Argentina
Colección Biblioteca Narrativa
2018
ISBN: 978-987-3972-74-4
Páginas: 272
Formato: 160 x 230 mm


«El lugar de lo vivido, además del título de la novela, es una metáfora que envuelve una de las sensaciones que experimenta quien la lee. Cristian Vázquez compone una prosa que nos vuelve testigos presenciales de la trama. Es el lector quien vive ese lugar. El Año Nuevo del año 2000 no hay nada que confirme los anticipos de la ciencia ficción, ni autos voladores, ni marcianos; Florencio Varela, escenario de esta ficción, ofrece lo de siempre: cumbia, vitel toné, tíos borrachos y perros muertos de miedo. Esa noche, en la casa del Rana, se tejerán relaciones para realizar un atraco que terminará mal. Y esa trama policial acompaña como un fantasma la historia de un personaje que prefiere no hacerse cargo, no enfrentar aquello que lo persigue, que el tiempo transcurra sin tropiezos. Pero eso no es posible y la vida se transforma en un camino lleno de incertidumbre y temor por las calles del barrio. Una novela que guarda en sus páginas aventuras, pero también mucho humor, suspenso y una historia de amor de esas que todos guardamos en la memoria de nuestra juventud.»

Reseñas y notas de prensa:

«Podría inaugurar un nuevo género: el antipolicial. La trama corre con sobredosis de humor e inocencia en dirección a una presunta travesura de un grupo de conocidos planeada una noche de calor de diciembre de 1999: robarse el cartel de la estación. Un delito menor, casi simpático, del estilo de Bart Simpson, pero que al estar situado en el Conurbano devela otra realidad: transas, punteros, policías, corrupción. Un delito que el personaje de 20 años, partícipe necesario, involuntario e inocente, sólo busca olvidar. No quiere descubrir la verdad, confía en su buena suerte, en que los problemas se arreglarán solos, patea la pelota para adelante. Quiere seguir con su rutina: sus amigos, su trabajo en el kiosco, estudiar, tomar unas cervezas en el bar de la esquina y hablar del club del barrio y sus internas entre barras, dirigentes y jugadores con sueños profesionales, conversar sobre Hemingway, de El último tango en París, Titanes en el Ring, Luca Prodan, Sui Generis y Andrés Calamaro; pero en las calles de barro de Florencio Varela, además de ladridos de perros y cumbia, circulan rumores.» Lucía Bertotto, en Hecho en Bs. As. (Buenos Aires, abril de 2019)

«Es destacable que todavía haya escritores con ganas de contar historias (ni más ni menos) y editores lo suficientemente despiertos como para publicarlas con cariño y olvidarse de las modas editoriales. En tiempos en que sólo parecen importar las grandes épicas, los gestos vacíos y ampulosos, las vociferaciones exentas de todo contenido, hay que encomiar enfáticamente una novela que apuesta a lo mínimo, a lo íntimo, a lo cotidiano y a lo sencillo sin rebajarse jamás al facilismo de la trama o al efectismo de la forma. El lugar de lo vivido es, además, el vivo y áspero retrato de una época.» Analía Pinto, en Solo Tempestad (Buenos Aires, noviembre de 2018) – Leer la reseña completa.

«Trama policial con un personalísimo sentido del humor, esta novela sobrevuela por diferentes géneros y hace anclaje en una prosa que invita al lector a sumergirse en el año nuevo del 2000 en Florencio Varela, un territorio que, gracias al pulso narrativo de Vázquez, adopta una épica propia al ritmo de la cumbia, borracheras y perros muertos de miedo. Una novela para leer en estado hipnótico.» Diario El Día (La Plata, 18/11/2018) – Leer la nota completa.

«En esta narración amena y cautivante, el autor construye, con un estilo austero, ágil y dinámico, un universo reconocible, cercano y querible, con personajes entrañables con los que es imposible no encariñarse y regando la trama con un ingrediente grato y bienvenido, pero más que difícil de hallar: el del placer de contar historias. Historias de canciones, de escritores, de calles o de programas de televisión que crean un espacio en el que el lector quisiera quedarse habitando mucho más allá de la página final.» Emiliano Albertini, en La Pulseada (La Plata, enero de 2019) – Leer la reseña completa.